Pasó más de un mes para que Azul Azul se defendiera por la demanda del volante nacional Ángelo Araos por casi 400 millones de pesos tras acusar a la concesionaria de no pagarle el 10% de su traspaso a Corinthians.
Y la respuesta fue durísima, porque la sociedad anónima que administra a Universidad de Chile calificó al futbolista de “tramposo” y “alejado de la buena fe”.
En el documento que publicó La Tercera, Azul Azul expresó que “el señor Ángelo Araos, mediante la suscripción del contrato de cesión temporal y opción de compra, reconoció expresamente que aceptaba todas las condiciones estipuladas en dicho contrato (cesión temporal y opción de compra) y que renunciaba expresa e irrevocablemente a cualquier cantidad o porcentaje que pudiera corresponderle en virtud de dicho contrato, por ‘encontrarse incluidos en los emolumentos pactados con el Corinthians’ por concepto de su remuneración a recibir como jugador de fútbol profesional. (Cláusula quinta del Contrato de Cesión Temporal)”.
Sobre la actitud del antofagastino, lo calificó como “tramposo, y alejado de la buena fe (…) que desconoce todos los acuerdos suscritos y que propuestos por y alcanzados para materializar un traspaso deseado por el jugador, previo al término de su contrato”.
Por toda esta situación, la concesionaria exigió a los tribunales de justicia no hacer efectiva la demanda, aunque habrá que ver lo que determina el Juzgado de Letras del Trabajo de San Miguel, el próximo 17 de marzo.