Uno de los jugadores que antes que se paralizara el fútbol a nivel mundial, producto del coronavirus, vivía un grato momento, era el delantero chileno Christian Bravo, quien llegó esta temporada a Peñarol de Uruguay.
Luego de recalar en diferentes equipos, el “Plancha” encontró su lugar. A pesar de lo mencionado, el formado en Universidad de Chile recordó su corta estadía en Europa, etapa en la que no la pasó muy bien.
En conversación con Deportes en Agricultura, el exjugador de Universidad Católica aseguró que “A Udinese me fui sin saber lo que iba a ganar, es difícil. Yo venía de una población y recuerdo que mi sueldo en la U era $150 mil pesos”.
“Cuando llegué a Europa no sabía cuánto valía un euro. Viví un año en un hotel por miedo a arrendar una casa”, agregó.
Sobre su paso por el Granada de España, Bravo comenzó a extrañar a su familia. “Echaba de menos mucho cuando estaba allá, por eso regresé. Viví ese proceso con mi señora, pero uno es chico y toma malas decisiones”.
Otra de las cosas que conversó el “Plancha” Bravo con Deportes en Agricultura fue sobre su llegada a Peñarol de Uruguay. “Me costó llegar ahí porque he tenido altas y bajas en mi carrera. Llegué acá y era el único extranjero acá”.
“Llegué a una pretemporada y con suerte tres me saludaron a la cara. Después me gané al equipo jugando, me pegaban patadas, pero levantaba. Te ponen a prueba, es duro”, cerró.