Universidad Católica logró su primer gran objetivo de la temporada y accedió a los octavos de final de la Copa Libertadores luego de derrotar 2-0 a Atlético Nacional en San Carlos de Apoquindo. Los goles de Luciano Aued (9′) y Diego Valencia (79′) terminaron con una espera de 3.695 días y 30 partidos.
Sebastián Pérez, arquero de los cruzados, conversó con Deportes en Agricultura y resaltó el significado de esta victoria tanto en lo colectivo como personal. Hay que consignar que este fue el primer duelo que jugó el “Zanahoria” luego del descenso con Deportes Iquique.
“Es así el fútbol y la vida. Había que estar preparado, independiente de ser segundo arquero. Sabía que más allá de un partido me podía tocar. Lo tomé con mucha tranquilidad el partido, sabiendo la responsabilidad que tenía. Es algo histórico para la institución y siempre me mantuve tranquilo. Creo que salió a la perfección todo lo que planificamos”, explicó.
El guardavallas, además, espera que lo conseguido en el torneo continental sea un revulsivo para la irregularidad mostrada en el Campeonato Nacional y no se hace “mala sangre” por el rival en la ronda de los 16 mejores.
“Creo mucho en los desafíos y los proyectos y espero tener un buen paso en la Católica. Lo que pasó anoche nos tiene que dar más fuerzas y confianzas para lo que viene y más allá del rival, será muy competitivo y complicado. El que nos toque será bien duro”, cerró.
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