Argentina golpeó primero en la final de la Copa del Mundo. Los albicelestes se pusieron en ventaja a los 23 del primer tiempo con gol de penal de Lionel Messi.
Sin embargo, la polémica se apoderó del Estadio Lusail. Esto porque los franceses reclamaron que no hubo infracción de Ousmane Dembélé sobre Ángel Di María.
Pese a las protestas galas, el árbitro del encuentro no dudó y sancionó la pena máxima con la que los argentinos abrieron el marcador.