Las lesiones no dejan tranquilo a Zlatan Ibrahimovic. El destacado delantero de 41 años sufrió inconvenientes físicos en el calentamiento del partido ante el Lecce, por lo que no pudo estar disponible para Stefano Pioli.
De hecho, el entrenador del Milan se refirió a la lamentable situación que enfrentó el sueco: “Quería hacerle jugar, pero me dijo que no podía”. Y es que Ibra se disponía a la activación física para ingresar al campo de juego en el minuto 65, pero se lesionó.
Si bien el alcance de la lesión no se conoce, el seleccionado sueco se retiró al vestuario cojeando y acompañado de un masajista. Por lo que no pinta nada de bien y el Milan espera por las pruebas.