La Supercopa 2024 se sigue disputando fuera de la cancha. Y es que tras los graves incidentes protagonizados por hinchas de Colo-Colo, el Tribunal de Disciplina dejó a 12.820 asistentes a ese partido fuera de los próximos cinco encuentros del Cacique como local. Ante la decisión, la Garra Blanca lanzó un comunicado, más bien una amenaza a través de sus redes sociales: “Si quieren jugar sucio, le entramos“.
Con esta disposición, Colo-Colo no podrá vender, regalar, donar o entregar entradas ni invitaciones a ninguna de las 12.820 personas, entre las que destacan el presidente del Club Social y Deportivo Colo-Colo, y miembro del directorio de Blanco y Negro, Matías Camacho, y el ex volante de los albos Jaime Valdés.
A través de su cuenta de Instagram, desde la Garra Blanca manifestaron el descontento que produce esta sanción y advirtió a la ANFP que “si quieren jugar sucio, le entramos. Para nosotros la discriminación social es pan de cada día, la vivimos desde nuestro nacimiento hasta el día de nuestra muerte. La vivimos en salud, educación, sin acceso a áreas verdes, vivienda, acceso a la justicia, y un largo etcétera”.
“Tampoco somos católicos, como para andar colocando la otra mejilla, nos provocan y reaccionamos. Respondimos de la misma manera en que nos tratan en nuestra vida cotidiana, con violencia. Cuando la tiranía es ley la revolución es orden”, añadieron desde la parcialidad colocolina.
El comunicado sigue: “Sin embargo, la ANFP no encontró nada más inteligente que discriminar arbitrariamente a toda la galería norte, a 12.820 hinchas colocolinos, siendo que la mayoría de los hinchas no se involucró en el enfrentamiento en contra la seguridad privada que contrató el organizador del espectáculo deportivo”.
“A toda vista, este es un acto ilegal y arbitrario, vulnerando el principio de inocencia e igualdad. Es una discriminación en contra de la gente más humilde, que con mucho esfuerzo compra una entrada a un sector popular a un precio elevado. El organizador del evento falló en la seguridad de principio a fin. Es más, la ANFP debería devolver el dinero de las entradas, por su negligente manejo de la situación“, profundizaron.
Además, manifestaron su postura frente al Registro Nacional de Hinchas y apuntaron la responsabilidad por lo ocurrido a la ANFP. “Quedó de manifiesto que los enrolamientos, los empadronamientos y el reconocimiento biométrico no sirvieron ni servirán. Estos actos arbitrarios y discriminativos solamente generan más odio y nos ponen en posiciones antagónicas con las autoridades de turno, tanto del fútbol como las autoridades del Estado”.
Por último, cerraron el comunicado diciendo que “Si quieren jugar sucio, también sabemos jugar sucio! Sabemos como vulnerar sus accesos”.
