Este lunes el futbolista argentino Lionel Messi cumple 37 años y reflexionó acerca de su talento para el fútbol, sus primeros pasos como futbolista y las claves de una carrera llena de logros.
En conversación con Clank! el capitán de la selección argentina, próximo rival de Chile en la Copa América, señaló que “por lo que dicen, desde muy chico siempre era diferente. La gente me iba a ver. Yo no me daba cuenta. Fui entendiendo eso cuando fui creciendo. Tenía 3 o 4 años y no era consciente del Mundial y todos los títulos que se jugaban. Simplemente jugaba porque me encantaba la pelota, me divertía con una pelota. Era mi pasatiempo”.
“Nací con eso. Me encantó el fútbol, como a la mayoría de los argentinos, desde muy chiquito. Siempre fue mi manera de verlo, más allá de mis responsabilidades, de los objetivos que uno se proponía cuando ya era más profesional. Siempre intenté divertirme, como lo hice desde el primer día”, añadió.
Al abordar aspectos claves de su talento para el fútbol, Messi no dudó en señalar que “tengo muy claro que nací así porque Dios me eligió a mí, fue un don él que me dio. Yo intenté aprovecharlo, hice todo lo posible para sacarle todo el jugo. La verdad, si bien hice muchas cosas, no hice nada para ser el jugador que ya era de chiquito”.
Esa vorágine de los títulos y la competencia al máximo nivel es algo que Lionel Messi maneja con tranquilidad. Hoy, en el Inter Miami y la selección albiceleste, le permite disfrutar del día a día “ahora más todavía”, luego de transformarse en el futbolista argentino más ganador de la historia.
“Después de haber conseguido todos los objetivos y haber tenido más de lo que hubiese imaginado y soñado desde chiquito, hoy estoy disfrutando como aquel chico. Sé que cada vez falta menos, que son menos los años que me quedan por edad. Intento disfrutar el fútbol adentro de una cancha y los momentos que vivo en el día a día también”, sostuvo.
Uno de los aspectos de la personalidad de la Pulga es su fuerte autocrítica, la que se acrecienta durante el desarrollo del juego. Incluso, contó que tiene diálogos internos para no salirse de los partidos. “Siempre fui así, muy autocrítico, creo que el que más. Soy el primero que sé cuando hago las cosas bien o cuando hago las cosas mal. Muchas veces me puteo que cómo voy a perder esa pelota, cómo voy a perder ese pase“, reveló.
“Por ejemplo, en la jugada del Mundial me quería matar porque si bien fue una pérdida lejos del arco, cerca del banco de ellos, era una pelota que la perdí por querer hacer una de más, por boludear, por no buscar ir para adelante y también porque cuando quiero hacer el último pasito medio que se me queda la pelota y me queda lejos y ahí es donde me corre el otro y me la saca”, recordó sobre aquella pelota perdida cerca de la mitad de la cancha que terminó en el empate de Kylian Mbappé, para Francia, en la final de Qatar 2022.