El derbi de Madrid se vio empañado por los incidentes que tuvieron lugar en el Wanda Metropolitano, los cuales obligaron a suspender durante algunos minutos el compromiso.
En el complemento del duelo, el árbitro Mateo Busquets Ferrer interrumpió el juego durante varios minutos debido al lanzamiento de objetos contundentes sobre el portero merengue Thibaut Courtois.
Tras el informe arbitral, el Comité de Competición decidió imponer a los Colchoneros “una sanción de clausura parcial de su recinto deportivo por un período de tres partidos y una sanción pecuniaria de 45.000 euros”.
De esta forma, el sector donde se ubica el ‘Fondo Sur’, la barra del elenco madrileño, permanecerá clausurado en los próximos tres compromisos por La Liga.
El castigo se debe a que desde Atlético de Madrid “no se adoptaron las medidas suficientes para prevenir unos incidentes tan graves en la propia acción multitudinaria”.
