La partida de Robbie Robinson de la concentración de la selección fue un duro golpe para la Roja. En Juan Pinto Durán creyeron que el delantero estaba convencido de jugar por Chile, aunque finalmente fue el propio jugador quien aseguró que se tomará un tiempo para decidir a qué selección defenderá.
El camino para convocar a Robinson no fue fácil. El primero que quiso contar con el ariete fue Reinaldo Rueda, quien finalmente no pudo incluirlo en sus nóminas. Por ello, con la llegada de Francis Cagigao, fue el propio director deportivo de la Roja que intentó convencerlo de vestir la camiseta de Chile.
Cagigao dialogó durante varios meses con el entorno del jugador, con su representante y con el propio Robinson. Incluso, la semana pasada el director deportivo viajó hasta Miami para traerlo a jugar la fecha triple de las Eliminatorias.
“El chico estaba en una situación complicada. Yo personalmente llevo cuatro meses hablando con él. En este caso concreto corríamos el riesgo de que la selección de Estados Unidos interceptara. Hubo mucho lobby para que jugara por EE.UU. y no con Chile. Esto me obligó a hacer un viaje a Miami para resolver ese tema”, sostuvo Cagigao.
El director deportivo de la Roja estaba seguro de haber convencido a Robinson. Incluso, confesó que arribaron juntos al país para que el delantero vistiera la camiseta nacional en la próxima fecha triple. “El chico pudo firmar la carta que le daba potestad a Chile. El chico lo que realmente quiere hacer es jugar por Chile, la tierra de su madre. Pudimos resolver esos temas en Florida y volví con el jugador. Él lleva dos entrenamientos y poco a poco se está integrando con la selección chilena”, comentó.
Sin embargo, tras las dos prácticas y a menos de 24 horas del duelo ante Brasil, la situación cambió rotundamente. El jugador decidió abandonar la concentración para “evaluar a cuál selección representar”. El futuro de Robinson es incierto y su partida de Juan Pinto Durán generó más de un dolor de cabeza al interior de la Roja.