Este último sábado de abril en “Te paso a buscar”, Pancho Saavedra conversó en su recorrido por las calles de la capital con la actriz Gloria Münchmeyer. La invitada tiene una incomparable trayectoria en televisión y en las tablas del teatro nacional. Además, es creadora de inolvidables personajes y ha tenido reconocimientos en el cine a nivel internacional.
Gloria contó que desde siempre supo que el teatro era lo que a ella le gustaba. En el colegio actuaba en todas las obras que hacían y en las clases de artes ella aprovechaba de leerles a sus amigas, interpretando a diversos personajes y jugando con la voz.
Terminado el colegio, junto a su hermana viajan a Francia. Es en este país donde logró descubrirse y junto a clases de teatro, expresión corporal y de francés, definió que el teatro era a lo que se quería dedicar. De vuelta en Chile, en la ciudad de Valparaíso ingresó al “Teatro Aficionado Universitario”.
Fue ahí donde, simplemente, cambió su vida. “En un festival de teatro universitario, Jorge Díaz, Claudio Di Girólamo y Jaime Celedón me vieron y me dijeron ‘¿te quieres ir con nosotros a Santiago?’, era como si hoy te dijeran ¿te quieres ir a Nueva York?”. Ahí empieza mi carrera más profesional, aprendiendo mucho de todo lo que tenía que hacer”, recordó la villana de la destacada teleserie de Canal 13 “Los títeres”.
Carrera que menciona nunca haber abandonado ni en las vacas flacas: “tuve muchas vacas flacas porque así es el oficio, sobre todo en teatro que cuesta mucho levantar una obra y conseguirse la plata”. En relación a estar en la pantalla chica, declaró que “hubo una época en que yo hacía televisión todos los años”. La actriz estuvo 20 años en Canal 13, donde es recordada por sus grandes e inolvidables personajes. Estos comenzaron con “Estrella”, el personaje que mataba a “Patricia” en la producción dramática “La madrastra” del año 1981.
Cambiando de tema, la artista comentó que “para esta época soy bastante retrógrada. Me cuesta mucho pillar a la gente joven, me cuesta entender. Tengo una nieta, que es muy de avanzada política y moralmente hablando. La Antonia de avanzada total, la encuentro genial e inteligente y trato de comprenderla, pero es un mundo totalmente diferente, es la otra cara de la medalla de lo que a mí me enseñaron que había que hacer”, reflexionó en torno a los nuevos tiempos.
En relación a ser una actriz que hizo mucho humor y, como le recordó Pancho Saavedra, por haber recibido el año pasado el Premio Nacional del Humor de Chile, Münchmeyer aclaró, “lo que yo hago es una actuación, no humor. Soy comediante, pero no humorista, ahí hay una diferencia. Yo no escribo el libreto, lo interpreto”.
En cuanto a esta temática, la intérprete recordó al actor y director Andrés Rillón, a quien le debe su acercamiento a la comedia e hizo énfasis en que ella junto a la comediante y actriz Rebeca Ghigliotto fueron los creadores de “La Vicky y la Gaby”. Un recordado y divertido sketch de los programas de Canal 13 “Medio mundo” y “Venga conmigo”, donde dos mujeres completamente distintas con hilarantes diálogos hacían reír al público nacional.
Una de las sorpresas que preparó para esta jornada el espacio “Te paso a buscar” fue la presencia de la comediante Natalia Valdebenito, quien en medio de una interesante conversación, hizo varias apariciones interpretando a la mesera del recinto, y a quien Gloria nunca reconoció. Finalmente, Natalia tuvo que sacarse la mascarilla para que la actriz la pudiera reconocer y darle un cariñoso abrazo.
Pancho Saavedra le preguntó sobre el amor en su vida y su relación con el padre de sus dos hijos, Jorge Guerra, a lo que Gloria señaló que no cree en el matrimonio, “creo en las relaciones profundas, estables, pero con plazos definidos, cada ocho años y renovables… Es muy difícil que tú seas la misma persona que cuando te casaste. Y los que lo logran es por una capacidad de adaptación muy grande”. Comentó que no logró mantener su vínculo con Guerra, porque él se enamoró de otra mujer. “Le hice la maleta y se fue”, recordó.
La actriz, reconocida como uno de los emblemas de la televisión chilena por sus diversos roles, reveló que cuando quedó sola con la crianza de sus hijos fue muy difícil por los horarios de su trabajo. “Mis hijos tuvieron adiestramiento especial para autoabastecerse porque yo no estaba”, declaró. Sin embargo, también rememoró cuando los tres subían el cerro San Cristóbal, que era el lugar de paseo favorito, “salimos todo lo que podíamos, agarrábamos las bicicletas y subíamos el cerro. Subíamos también el teleférico”.
El comunicador le preguntó a la icónica actriz por el éxito de su carrera, a lo que Gloria respondió: “El éxito no significa nada, porque yo no lo hago, no lo creo, yo no lo invento. El éxito es de los demás, los que producen el éxito que me llega a mí, porque yo no trabajo para el éxito, trabajo para hacer las cosas bien. Y si por añadidura tiene éxito lo que hago, fantástico”.
También, junto al animador recordaron el premio a la mejor actriz de Festival Internacional de Cine de Venecia en el año 1990 por su actuación en el filme “La luna en el espejo”, dirigida por el cineasta nacional Silvio Caiozzi. “Todavía eso no lo creo”, dijo de manera categórica, y continuó “Yo ni siquiera llevaba vestido, porque yo iba a aplaudir a Silvio, detrás de la barrera cuando subiera las escaleras hacia el teatro”. Contó que después de eso volvió a España y Caiozzi la llamó para contarle que era la ganadora como Mejor Actriz, por lo que tuvo que volver a la ciudad de las góndolas y recibir el galardón con un vestido prestado.
En relación al cine, la actriz reveló que espera que a mediados de este año se estrene “El Conde”, film dirigido por Pablo Larraín y donde ella es una de sus protagonistas.
“Hay un estándar estético en televisión“
Frente a la pregunta de ¿qué le falta por hacer?, Münchmeyer señaló que “me gustaría morir en el escenario. Uno aspira a seguir trabajando, nosotros no jubilamos, actuamos hasta que ya no podemos más, porque lo que hacemos es un trabajo, pero también es una vocación y la vocación no se pierde nunca”.
La protagonista de telenovelas como “Marrón glacé”, “Champaña” y “Purasangre” reveló que actualmente le gustaría hacer teleseries: “me encantaría, pero ya no llaman a los actores viejos. Hay un estándar estético en televisión, tiene que ser gente bonita y joven. Imagínate que los que antes eran hijos míos ahora están siendo abuelos. La tele te jubila”.
Finalmente, Saavedra tuvo una última sorpresa para su invitada, una visita al Teatro Ictus, fundado en 1956 y donde Gloria comenzó su carrera como actriz en el año 1966, cuando viajó a Santiago desde Valparaíso con destacados dramaturgos. Era un lugar que no visitaba hace 10 años. Al sentarse en sus butacas, una nostálgica Münchmeyer sólo mencionó la palabra “emoción” y después añadió “salvo Claudio Di Girólamo, todos los demás murieron. Es toda una generación que ya no está y de la cual soy sobreviviente en una época en que se hacía teatro con una gran pasión y vocación”.